Panel: Definiendo una estrategia común después de Cochabamba.
Después de una hora de atraso se inició el panel “Definiendo una estrategia común después de Cochabamba”, en el que seis disertantes hicieron propuestas para definir una estrategia global para el cambio climático. Entre los puntos más relevantes se tocaron los siguientes temas: el referéndum mundial; cómo incitar a los gobiernos para castigar a las empresas que causan la destrucción de la Madre Tierra; facilitar cambios en el sistema político-económico y no del clima; establecer un tribunal mundial para penalizar a las transnacionales que destruyen el medio ambiente y el financiamiento a la justicia climática, entre otros. Este panel se caracterizó por lo concreto de sus propuestas.
El representante de ECOLOGISTAS EN ACCIÓN de España, propuso:”Hacer una campaña para que los gobiernos que firmaron el acuerdo en Copenhague, saquen su firma”, dijo también que “el cambio climático debería constituirse en un movimiento social y revivir la campaña contra el T.L.C.”
Lucia Ortiz Representante de AMIGOS DE LA TIERRA del Brasil propuso que:”Los fondos para el clima deben utilizarse para generar justicia climática y fomentar la soberanía de los pueblos. El financiamiento debería darles prioridad a las tecnologías y los conocimientos locales, y empoderar a los pueblos indígenas, las mujeres y otras poblaciones vulnerables”.
Una de las propuestas sobresalientes de Hernan Giardini, representante de GREEN PEACE de la Argentina fue generar un acuerdo climático global, una política regional y mundial para cambiar la estructura del cambio climático.
Los disertantes manifestaron que la cumbre de Copenhague fue un fracaso y que tienen la esperanza de que la cumbre realizada en Cochabamba, tenga resultados inmediatos, porque el clima no puede esperar ni a cumbres, ni a firmas, ni a charlas y que por lo tanto, los presidentes deberían asistir el próximo Diciembre en México, con cambios realizados y propuestas de fácil consenso en todos los continentes.
jueves, 22 de abril de 2010
miércoles, 21 de abril de 2010
Necesidad de especificar los otros elementos químicos
Luego de media hora de retraso y con aproximadamente 15 personas en aula, se dio paso a la lectura del documento base: el enmendado del Protocolo de Kioto y Compromisos de reducciones de emisiones de gas, con su respectiva corrección redactada por la Secretaria de mesa Alexandra Moreyra. El documento fue puesto en consideración a los presentes para emitir sus últimos aportes y correcciones pertinentes de la temática para emitir el documento oficial que será expuesto en la plenaria de las 2:30 pm en el Coliseo de la Universidad del Valle.
Por el reducido tiempo disponible, la última ronda de oradores tuvo que ser limitada a un minuto por participante, esto condujo a un desorden y posterior cierre de sesión debido a desacuerdos de los participantes sobre la redacción, gramática y sintaxis del documento. Hubo intervenciones que estaban fuera de contexto sobre temas tratados desde el inicio de la sesión, esto fue ocasionado por participantes que solo asistieron a las últimas sesiones; dichas intervenciones fueron rechazadas por el grupo de trabajo que estuvo desde el inicio.
Los temas más observados fueron:
• La ortografía sobre el manejo del término “Kioto”. Al principio del documento estuvo escrito “K(y)oto” y en el medio y en el resto del contenido de Compromisos estuvo escrito k(i)oto.
• Discusión de los responsables. En las sesiones anteriores se expuso que todos en conjunto somos los principales responsables del cambio climático, no obstante, el documento presentado al grupo puso como único y principal responsable al capitalismo (países desarrollados), lo que puede ocasionar un mal entendido “los países en desarrollo nos lavamos las manos”.
• La no declaración de los demás elementos químicos. Uno de los participantes expresó que al no especificar todos los demás elementos químicos a parte de los gases de carbono que están acabando con el Medio Ambiente, este “Protocolo de Kioto“, estaría siendo flexible e inconcreto para obtener los resultados que se espera, al igual que el “Entendimiento de Copenhague”. No obstante, el presidente de mesa David Iud respondió que no es necesario especificar todos los elementos químicos dañinos porque para enumerarlos y mencionarlos tiene que partir de una previa investigación.
• Equilibrio ¿de la o con la naturaleza? El presidente de la mesa 10, David Iud dijo que nosotros somos parte de la naturaleza, se debería utilizar el término “equilibrio de la naturaleza”; los participantes de la parte contraria manifestaron que el equilibrio es del ser humano para con la naturaleza, siendo el hombre el causante del desequilibrio.
Pese a los desacuerdos, la mesa de trabajo cerró su sesión con aplausos y agradecimientos por el arduo trabajo realizado por todos los participantes y los presidentes de mesa: Juvencia Guarachi, Presidenta de la Organización Bartolina Sisa (Bolivia); el señor David Yud, Presidente de la Carta Abierta (Argentina) y la Secretaria de mesa, Alexandra Moreyra. Todos esperan que este “Protocolo de Kioto y los Compromisos de Reducciones” se lleve al acto y no quede solo en palabras.
Por el reducido tiempo disponible, la última ronda de oradores tuvo que ser limitada a un minuto por participante, esto condujo a un desorden y posterior cierre de sesión debido a desacuerdos de los participantes sobre la redacción, gramática y sintaxis del documento. Hubo intervenciones que estaban fuera de contexto sobre temas tratados desde el inicio de la sesión, esto fue ocasionado por participantes que solo asistieron a las últimas sesiones; dichas intervenciones fueron rechazadas por el grupo de trabajo que estuvo desde el inicio.
Los temas más observados fueron:
• La ortografía sobre el manejo del término “Kioto”. Al principio del documento estuvo escrito “K(y)oto” y en el medio y en el resto del contenido de Compromisos estuvo escrito k(i)oto.
• Discusión de los responsables. En las sesiones anteriores se expuso que todos en conjunto somos los principales responsables del cambio climático, no obstante, el documento presentado al grupo puso como único y principal responsable al capitalismo (países desarrollados), lo que puede ocasionar un mal entendido “los países en desarrollo nos lavamos las manos”.
• La no declaración de los demás elementos químicos. Uno de los participantes expresó que al no especificar todos los demás elementos químicos a parte de los gases de carbono que están acabando con el Medio Ambiente, este “Protocolo de Kioto“, estaría siendo flexible e inconcreto para obtener los resultados que se espera, al igual que el “Entendimiento de Copenhague”. No obstante, el presidente de mesa David Iud respondió que no es necesario especificar todos los elementos químicos dañinos porque para enumerarlos y mencionarlos tiene que partir de una previa investigación.
• Equilibrio ¿de la o con la naturaleza? El presidente de la mesa 10, David Iud dijo que nosotros somos parte de la naturaleza, se debería utilizar el término “equilibrio de la naturaleza”; los participantes de la parte contraria manifestaron que el equilibrio es del ser humano para con la naturaleza, siendo el hombre el causante del desequilibrio.
Pese a los desacuerdos, la mesa de trabajo cerró su sesión con aplausos y agradecimientos por el arduo trabajo realizado por todos los participantes y los presidentes de mesa: Juvencia Guarachi, Presidenta de la Organización Bartolina Sisa (Bolivia); el señor David Yud, Presidente de la Carta Abierta (Argentina) y la Secretaria de mesa, Alexandra Moreyra. Todos esperan que este “Protocolo de Kioto y los Compromisos de Reducciones” se lleve al acto y no quede solo en palabras.
Ambiente de tensión: Peligros del mercado de carbono
La cuarta sesión de la mesa 15 comenzó a las 10.30 hrs, hoy miércoles 21 de abril en la ciudad de Tiquipaya. Se retomó el tema a partir del punto ocho y se continuó con la revisión del documento para su presentación. Las principales observaciones manifestadas fueron que este documento no presenta una redacción técnica adecuada, algunos datos estadísticos incluso están fuera de lugar debido a que hasta la fecha, información pasada no ha tenido la actualización correspondiente, poniendo en peligro la vigencia de este documento y su respectiva aprobación. Los participantes realizaron una votación para elaborar la redacción del documento. El ambiente de tensión emergió nuevamente durante esta cuarta sesión, en el momento de la revisión del documento, debido a la abrupta interrupción de un participante de origen Chapareño quien quiso levantarse contra otros compañeros que no concordaban con su opinión. Se vio reflejada la copresidencia de Anahit Ahoronian y Manuel Rojas Boyan en esta sesión haciendo prevalecer el orden y respeto, luego de que como se mencionó en párrafos anteriores, algunos compañeros de mesa no se encontraban conformes con las correcciones y aprobaciones del documento redactado. Tras varias pausas, se dio continuidad al resumen de la problemática sobre las reducciones de gases de efecto invernadero. Se redactó exitosamente el documento, el cual será presentado en la plenaria el día de hoy a las 14.30 hrs la que será realizada en el Hotel Regina de Tiquipaya.
Culpa del capitalismo, compromiso de todos
Comisión de Comunicación Univalle.- Los países llamados “desarrollados” son los principales responsables de la emisión irracional de gases de efecto invernadero, sin embargo, es una obligación de toda la población reparar los daños causados a la Madre Tierra. Fue la principal conclusión de la mesa de trabajo “Deuda climática”, presidida por el representante de Canadá el Sr. Matthew Stilwell, durante el último día de propuestas y debates que se cumplió este miércoles en la Sala de Audioisual C3, del bloque de Medicina de la Universidad del Valle.
Más de una decena de párrafos representados en 4 hojas fueron analizados minuciosamente por todos los miembros de la mesa de trabajo. Las conclusiones que emerjan de este grupo, serán la base de las nuevas discusiones y deliberaciones próximamente tratadas en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Otras conclusiones del centenar de participantes de esta mesa, están basadas en exigir la restitución y la preservación de la Madre Tierra, sin repetir los errores y modelos de los países desarrollados.
“El sistema climático es un bien común que presta servicios ambientales diversos, lo mínimo que debemos hacer es retribuirle a la Madre Tierra”, este es un párrafo del texto que no tuvo discusión (Cmpcc, 2010)
El documento no sufrió grandes transformaciones, pero sí cambiaron algunos términos susceptibles a confusión, para que el texto tenga mayor comprensión y reforzar lo que se quiera transmitir referente al concepto de Deuda Climática. “Exigir”, “deber”, “implementar” y “restablecer y no “reducir el espacio atmosférico”, fueron los cambios más notables este documento (Cmpcc, 2010).
Tras tres días de discusión, la mesa de trabajo concluyó pasado el medio día, por consiguiente, estas conclusiones pasarán a la plenaria respectiva.
Más de una decena de párrafos representados en 4 hojas fueron analizados minuciosamente por todos los miembros de la mesa de trabajo. Las conclusiones que emerjan de este grupo, serán la base de las nuevas discusiones y deliberaciones próximamente tratadas en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Otras conclusiones del centenar de participantes de esta mesa, están basadas en exigir la restitución y la preservación de la Madre Tierra, sin repetir los errores y modelos de los países desarrollados.
“El sistema climático es un bien común que presta servicios ambientales diversos, lo mínimo que debemos hacer es retribuirle a la Madre Tierra”, este es un párrafo del texto que no tuvo discusión (Cmpcc, 2010)
El documento no sufrió grandes transformaciones, pero sí cambiaron algunos términos susceptibles a confusión, para que el texto tenga mayor comprensión y reforzar lo que se quiera transmitir referente al concepto de Deuda Climática. “Exigir”, “deber”, “implementar” y “restablecer y no “reducir el espacio atmosférico”, fueron los cambios más notables este documento (Cmpcc, 2010).
Tras tres días de discusión, la mesa de trabajo concluyó pasado el medio día, por consiguiente, estas conclusiones pasarán a la plenaria respectiva.
panel 13 “No cambiemos el clima sino el sistema”
“El entendimiento de Copenhague ha sido más bien un desentendimiento” expresó la Ministra de Medio Ambiente y Agua del Estado Plurinacional de Bolivia, María Esther Udaeta al inaugurar el panel sobre las perspectivas de gobiernos sobre las negociaciones de cambio climático.
La ministra hizo un llamado para que se encuentren bases comunes para entablar las negociaciones sobre este problema que tiene un carácter mundial.
El vicepresidente de la República de Burundi, Yves Sahinguvu, manifestó el profundo agradecimiento del pueblo de su país al presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales Ayma, por la iniciativa de esta histórica conferencia que llega en un momento adecuado después de Copenhague, que no llegó a ninguna solución “y es por eso, que estamos otra vez acá”.
El mandatario aseguró que “este encuentro nos pone el reto para ayudar al planeta” al momento de indicar que las decisiones de esta conferencia deben ser compartidas con responsabilidades comunes.
Sahinguvu manifestó que su país al igual que otros son víctimas de catástrofes climáticas por los efectos del cambio meteorológico que afectan a la vida humana; indicó de igual manera que esta es una voz de alarma para llegar a un acuerdo que verdaderamente ayude y satisfaga a todos.
“Las catástrofes climáticas son un problema para el desarrollo de los países más necesitados como el caso de Burundi” expresó el mandatario durante su intervención.
Instó a todos los países a llegar a un acuerdo para que ayude a los países en vías de desarrollo y que disminuya la emisión de gases de los países desarrollados, lo que sería de gran ayuda para las naciones menos desarrolladas.
En su discurso la Ministra del Poder Ciudadano para el ambiente y recursos naturales de Nicaragua, Juana Argueñal Sandoval, felicitó al presidente Evo Morales por lograr la oportunidad de que los pueblos hablen del cambio climático.
La ministra señaló que la unidad de los pueblos y gobernantes se expresa a través de la Alianza Bolivariana para los pueblos de Nuestra América (ALBA).
Argueñal manifestó que se debe garantizar la seguridad alimentaria, el acceso al agua potable y la salud en los pueblos al momento de señalar que los países desarrollados son los que contaminan y los países como Nicaragua son propensos a sufrir catástrofes climáticas porque “el cambio climático es una realidad”.
La autoridad nicaragüense hizo conocer su esperanza en que se trabaje con todos los países de Latinoamérica y el mundo desde esta conferencia, que demuestra que los países de este continente están dispuestos al cambio.
“No cambiemos el clima sino el sistema” enfatizó Argueñal al señalar que Cochabamba es el inicio de la batalla al cambio climático. Además señaló que todas las propuestas de esta conferencia que se desarrolla en el departamento de Cochabamba sean enviadas al Secretario General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon y al Presidente de la República de México, Felipe Calderón –país anfitrión de la próxima cumbre mundial por el cambio climático).
El representante especial para cambio climático de México, Luis Alfonso de Alba, sostuvo que no creen en una reconducción del Protocolo de Kioto sino que se deben aplicar artículos más ambiciosos. Además convocó a los países que no son miembros del tratado de Kioto a asumir sus responsabilidades de reducir sus niveles de emisión de gases.
De Alba señaló “las Naciones Unidas nos pertenecen a todos” y sostuvo que el trabajo de esta organización debe ser mejor que lo que ha sido hasta ahora.
Al concluir su exposición el representante mexicano señaló que las propuestas que emanen de esta conferencia deben servir para restablecer la relación entre los pueblos y gobiernos.
Valerie Anne Bernard, representante de la ministra de Medio Ambiente de Francia hizo conocer que su país tiene un compromiso de reducir sus gases de efecto invernadero en un 20 por ciento e instó a los países desarrollados a reducir en un 30 por ciento mientras los menos desarrollados entre un 15 y 30 por ciento hasta el año 2020.
La expositora francesa señaló que tanto su país como Noruega están trabajando en un plan de lucha contra la deforestación.
Al concluir Bernard señaló “los países tienen que avanzar mano a mano y tratar de armar una alianza que haga fuerza frente a los grandes países emisores de gases”.
El subdirector de medio ambiente del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, Waldemar Coutts, calificó a la conferencia como un diálogo inclusivo, masivo y democrático que sirve para que las conclusiones de los pueblos lleguen a la convención marco de las Naciones Unidas para el medio ambiente.
“Esperamos un acuerdo global, ambicioso y efectivo contra el cambio climático” señaló el Ministro de Relaciones Exteriores de la Dirección de Medio Ambiente de la República del Perú, Alberto Hart Popesta, al referirse a la realización de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra que se desarrolla en Cochabamba.
Hart aseguró que las disposiciones que emanen de la cumbre marco de las Naciones Unidas y del Tratado de Kioto deben cumplirse. Indicó que la propuesta en conjunto es que las emisiones de gas se deben reducir en un 30 por ciento y hasta el año 2050 un 40 por ciento.
El Dr. K.J. Srinivasa, encargado de negocios de la Embajada de la India en Perú, señaló que los países en vías de desarrollo están en una encrucijada debido a que o frenan el desarrollo o contaminan, de cierto modo, al mundo.
Hizo conocer que las emisiones de dióxido de carbono per cápita son más bajas que la de Estados Unidos, los países de la Unión Europea, China y Japón a pesar de que el 17 por ciento de la población mundial habita ese país. También reiteró el compromiso de su país de mantener esos niveles de emisión de gases.
Srinivasa señaló también que los países desarrollados deben promover tecnologías que sean combatibles con el cambio climático. Debido a que las aspiraciones de los países en vías de desarrollo se ven afectadas por este problema mundial.
El representante de India sostuvo que los países desarrollados buscan aceptar solo el acuerdo de Copenhague porque no es ambicioso y de esta manera, perjudica a los países menos desarrollados. Al momento de manifestar que dicho acuerdo “está por detrás de nuestros intereses”. Sin embargo, manifestó que sirve como una base para la negociación.
Apeló también a mostrar una mayor sensibilidad para lograr acuerdos que solucionen el problema del cambio climático en el planeta.
El representante de la Dirección de Asuntos Ambientales del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación Argentina, Samuel Ortiz Basualdo, empezó su exposición manifestando que el cambio climático y sus consecuencias son los nuevos desafíos de la humanidad.
Propuso que los países de primer mundo regulen su consumo para, de esta manera, reducir sus emisiones de gases; además de transferir tecnología menos contaminante a los países en vías de desarrollo.
Al concluir también señaló que el fracaso de Copenhague es una muestra del poco interés de los países desarrollados de reducir la emisión de gases.
Doménico Bruzzone, Director Oficina Regional de la Cooperación Italiana de la Embajada de Italia en Bolivia, señaló que el cambio climático y el calentamiento global es un problema cultural, es decir, por los medios de producción utilizados en las sociedades. “El progreso técnico no logró compensar los impactos de los cambios climáticos” manifestó Bruzzone al destacar que el diálogo con la herramienta multilateral es muy importante para arribar a puntos comunes que den una solución al problema del cambio climático.
El subdirector de asuntos multilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Pedro Luis Pedroso, manifestó que el espacio que brinda esta conferencia mundial es lo que no hubo en Copenhague.“La crisis del cambio climático es la peor amenaza a la especie humana” enfatizó Pedroso al señalar que el sistema destruye progresivamente al mundo.
Catalogó como engaño al acuerdo de Copenhague que en nada ayuda a la problemática del cambio climático y denunció que este acuerdo pretende reemplazar al Tratado de Kioto. Y si aceptara este documento significaría admitir que para países del África sería difícil la cosecha de ciertos alimentos.
Sin embargo, indicó que lo que se debe hacer es fortalecer el Tratado de Kioto con compromisos más ambiciosos. Citó un ejemplo de México que como país en vías de desarrollo puede reducir en 30 por ciento sus emisiones de gas qué impide a los países de primer mundo reducir un 45 por ciento hasta 2020.
Advirtió que no se puede rebajar un tratado internacional, como el de Kioto, para privilegiar a los principales responsables del calentamiento global, Estados Unidos.
Señaló que debe existir un acuerdo de cooperación a largo plazo para el desarrollo de los países menos desarrollados que respete las responsabilidades comunes pero diferenciadas. Para esto propone que los países más desarrollados comprometan 400 mil millones de dólares anuales a la lucha contra el cambio climático a diferencia de los 30 mil millones que pretenden invertir hasta el 2012 y hasta los 100 mil millones el 2020.
Por último propuso que el 1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de los países deberían estar destinados para temas de interés mundial como el del cambio climático.
La ministra hizo un llamado para que se encuentren bases comunes para entablar las negociaciones sobre este problema que tiene un carácter mundial.
El vicepresidente de la República de Burundi, Yves Sahinguvu, manifestó el profundo agradecimiento del pueblo de su país al presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales Ayma, por la iniciativa de esta histórica conferencia que llega en un momento adecuado después de Copenhague, que no llegó a ninguna solución “y es por eso, que estamos otra vez acá”.
El mandatario aseguró que “este encuentro nos pone el reto para ayudar al planeta” al momento de indicar que las decisiones de esta conferencia deben ser compartidas con responsabilidades comunes.
Sahinguvu manifestó que su país al igual que otros son víctimas de catástrofes climáticas por los efectos del cambio meteorológico que afectan a la vida humana; indicó de igual manera que esta es una voz de alarma para llegar a un acuerdo que verdaderamente ayude y satisfaga a todos.
“Las catástrofes climáticas son un problema para el desarrollo de los países más necesitados como el caso de Burundi” expresó el mandatario durante su intervención.
Instó a todos los países a llegar a un acuerdo para que ayude a los países en vías de desarrollo y que disminuya la emisión de gases de los países desarrollados, lo que sería de gran ayuda para las naciones menos desarrolladas.
En su discurso la Ministra del Poder Ciudadano para el ambiente y recursos naturales de Nicaragua, Juana Argueñal Sandoval, felicitó al presidente Evo Morales por lograr la oportunidad de que los pueblos hablen del cambio climático.
La ministra señaló que la unidad de los pueblos y gobernantes se expresa a través de la Alianza Bolivariana para los pueblos de Nuestra América (ALBA).
Argueñal manifestó que se debe garantizar la seguridad alimentaria, el acceso al agua potable y la salud en los pueblos al momento de señalar que los países desarrollados son los que contaminan y los países como Nicaragua son propensos a sufrir catástrofes climáticas porque “el cambio climático es una realidad”.
La autoridad nicaragüense hizo conocer su esperanza en que se trabaje con todos los países de Latinoamérica y el mundo desde esta conferencia, que demuestra que los países de este continente están dispuestos al cambio.
“No cambiemos el clima sino el sistema” enfatizó Argueñal al señalar que Cochabamba es el inicio de la batalla al cambio climático. Además señaló que todas las propuestas de esta conferencia que se desarrolla en el departamento de Cochabamba sean enviadas al Secretario General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon y al Presidente de la República de México, Felipe Calderón –país anfitrión de la próxima cumbre mundial por el cambio climático).
El representante especial para cambio climático de México, Luis Alfonso de Alba, sostuvo que no creen en una reconducción del Protocolo de Kioto sino que se deben aplicar artículos más ambiciosos. Además convocó a los países que no son miembros del tratado de Kioto a asumir sus responsabilidades de reducir sus niveles de emisión de gases.
De Alba señaló “las Naciones Unidas nos pertenecen a todos” y sostuvo que el trabajo de esta organización debe ser mejor que lo que ha sido hasta ahora.
Al concluir su exposición el representante mexicano señaló que las propuestas que emanen de esta conferencia deben servir para restablecer la relación entre los pueblos y gobiernos.
Valerie Anne Bernard, representante de la ministra de Medio Ambiente de Francia hizo conocer que su país tiene un compromiso de reducir sus gases de efecto invernadero en un 20 por ciento e instó a los países desarrollados a reducir en un 30 por ciento mientras los menos desarrollados entre un 15 y 30 por ciento hasta el año 2020.
La expositora francesa señaló que tanto su país como Noruega están trabajando en un plan de lucha contra la deforestación.
Al concluir Bernard señaló “los países tienen que avanzar mano a mano y tratar de armar una alianza que haga fuerza frente a los grandes países emisores de gases”.
El subdirector de medio ambiente del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, Waldemar Coutts, calificó a la conferencia como un diálogo inclusivo, masivo y democrático que sirve para que las conclusiones de los pueblos lleguen a la convención marco de las Naciones Unidas para el medio ambiente.
“Esperamos un acuerdo global, ambicioso y efectivo contra el cambio climático” señaló el Ministro de Relaciones Exteriores de la Dirección de Medio Ambiente de la República del Perú, Alberto Hart Popesta, al referirse a la realización de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra que se desarrolla en Cochabamba.
Hart aseguró que las disposiciones que emanen de la cumbre marco de las Naciones Unidas y del Tratado de Kioto deben cumplirse. Indicó que la propuesta en conjunto es que las emisiones de gas se deben reducir en un 30 por ciento y hasta el año 2050 un 40 por ciento.
El Dr. K.J. Srinivasa, encargado de negocios de la Embajada de la India en Perú, señaló que los países en vías de desarrollo están en una encrucijada debido a que o frenan el desarrollo o contaminan, de cierto modo, al mundo.
Hizo conocer que las emisiones de dióxido de carbono per cápita son más bajas que la de Estados Unidos, los países de la Unión Europea, China y Japón a pesar de que el 17 por ciento de la población mundial habita ese país. También reiteró el compromiso de su país de mantener esos niveles de emisión de gases.
Srinivasa señaló también que los países desarrollados deben promover tecnologías que sean combatibles con el cambio climático. Debido a que las aspiraciones de los países en vías de desarrollo se ven afectadas por este problema mundial.
El representante de India sostuvo que los países desarrollados buscan aceptar solo el acuerdo de Copenhague porque no es ambicioso y de esta manera, perjudica a los países menos desarrollados. Al momento de manifestar que dicho acuerdo “está por detrás de nuestros intereses”. Sin embargo, manifestó que sirve como una base para la negociación.
Apeló también a mostrar una mayor sensibilidad para lograr acuerdos que solucionen el problema del cambio climático en el planeta.
El representante de la Dirección de Asuntos Ambientales del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación Argentina, Samuel Ortiz Basualdo, empezó su exposición manifestando que el cambio climático y sus consecuencias son los nuevos desafíos de la humanidad.
Propuso que los países de primer mundo regulen su consumo para, de esta manera, reducir sus emisiones de gases; además de transferir tecnología menos contaminante a los países en vías de desarrollo.
Al concluir también señaló que el fracaso de Copenhague es una muestra del poco interés de los países desarrollados de reducir la emisión de gases.
Doménico Bruzzone, Director Oficina Regional de la Cooperación Italiana de la Embajada de Italia en Bolivia, señaló que el cambio climático y el calentamiento global es un problema cultural, es decir, por los medios de producción utilizados en las sociedades. “El progreso técnico no logró compensar los impactos de los cambios climáticos” manifestó Bruzzone al destacar que el diálogo con la herramienta multilateral es muy importante para arribar a puntos comunes que den una solución al problema del cambio climático.
El subdirector de asuntos multilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Pedro Luis Pedroso, manifestó que el espacio que brinda esta conferencia mundial es lo que no hubo en Copenhague.“La crisis del cambio climático es la peor amenaza a la especie humana” enfatizó Pedroso al señalar que el sistema destruye progresivamente al mundo.
Catalogó como engaño al acuerdo de Copenhague que en nada ayuda a la problemática del cambio climático y denunció que este acuerdo pretende reemplazar al Tratado de Kioto. Y si aceptara este documento significaría admitir que para países del África sería difícil la cosecha de ciertos alimentos.
Sin embargo, indicó que lo que se debe hacer es fortalecer el Tratado de Kioto con compromisos más ambiciosos. Citó un ejemplo de México que como país en vías de desarrollo puede reducir en 30 por ciento sus emisiones de gas qué impide a los países de primer mundo reducir un 45 por ciento hasta 2020.
Advirtió que no se puede rebajar un tratado internacional, como el de Kioto, para privilegiar a los principales responsables del calentamiento global, Estados Unidos.
Señaló que debe existir un acuerdo de cooperación a largo plazo para el desarrollo de los países menos desarrollados que respete las responsabilidades comunes pero diferenciadas. Para esto propone que los países más desarrollados comprometan 400 mil millones de dólares anuales a la lucha contra el cambio climático a diferencia de los 30 mil millones que pretenden invertir hasta el 2012 y hasta los 100 mil millones el 2020.
Por último propuso que el 1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de los países deberían estar destinados para temas de interés mundial como el del cambio climático.
CONCLUSIONES FINALES MESA DE TRABAJO Nº 17 AGRICULTURA Y SOBERANÍA ALIMENTARIA
En la Mesa de Trabajo 17 “Agricultura y Soberanía Alimentaria” se aprobaron los 25 artículos puestos en debate. Inicialmente, eran 21 pero -durante la revisión y el debate- se fueron implementando otros tres artículos, por su importancia y unánime decisión de los integrantes de la mesa.
Durante la última reunión, se llegó a un acuerdo general:
“Los movimientos sociales y organizaciones populares, reunidos en la Cumbre, constatamos que -a pesar de nuestras numerosas movilizaciones y constantes denuncias- los gobiernos capitalistas, los organismos internacionales y las entidades financieras continúan en la senda de agravar la destrucción del Planeta. El Cambio Climático es una de las más serias amenazas a la Soberanía Alimentaria de todos los pueblos del mundo. Una vez más constatamos que:
1. El agronegocio, a través de su modelo social, económico y cultural de producción capitalista globalizada y su lógica de producción de alimentos para el mercado y no para cumplir con el derecho a la alimentación, es una de las causas principales del Cambio Climático. El cambio de uso de suelo (la deforestación y la expansión de la frontera agrícola), los monocultivos, la producción, comercialización y utilización de insumos agrotóxicos y agroquímicos, el procesamiento industrial de alimentos y toda su logística para transportarlos miles de kilómetros hasta llegar al consumidor, la producción de GEI en los megadepósitos de basura y estiércol de la ganadería industrial intensiva son causantes principales de la crisis climática y del crecimiento del número de personas hambrientas en el mundo.
2. La depredación y destrucción de los acuíferos, las fuentes y los cuerpos de agua y de los ecosistemas y ciclos ecológicos, que le dan vida, están indisolublemente ligados a los procesos de privatización, que se impulsan desde los gobiernos capitalistas y los organismos internacionales. Al mismo tiempo, que vemos cómo el Cambio Climático destruye glaciares y otras fuente de agua, constatamos que el derecho humano fundamental de acceso al agua para el consumo de los seres vivos y la producción de alimentos se restringe, día a día, producto del avance de la agropecuaria industrial, la minería, la extracción de hidrocarburos, el procesamiento industrial de alimentos, las plantaciones forestales, la plantación y producción de agrocombustibles, la acuicultura industrial y los megaproyectos hidroeléctricos.
3. El despliegue territorial de megaproyectos de infraestructura, al servicio del capital, altera los procesos naturales, sociales y culturales, imposibilitando formas de convivencia armoniosa con la Madre Tierra, destruyendo medios de vida, expulsando a las comunidades campesinas, indígena y pescadoras de sus territorios y facilitando la expansión del modelo extractivo y agroexportador.
4. El Cambio Climático provoca la migración forzada en las áreas rurales; es una amenaza para los pueblos indígenas/originarios, comunidades campesinas y de pescadores, quienes son los más damnificados al ser destruidos sus medio de vida, su sabiduría agrícola ancestral y local y, por ende, su identidad.
5. Los agrocombustibles no representan una alternativa porque anteponen la producción agrícola para el transporte, frente a la producción de alimentos para los seres humanos. Los agrocombustibles amplían la frontera agrícola, destruyendo los bosques y la biodiversidad, generan monocultivos, promueven la concentración de la tierra, deterioran los suelos, agotan las fuentes de agua, contribuyen al alza del precio de los alimentos y consumen más energía de la que generan.
6. Los Organismos Genéticamente Modificados (OGM) tampoco son una solución al Cambio Climático y representan exclusivamente un instrumento de las corporaciones para controlar las semillas y la alimentación a nivel global. Significan un serio atentado contra el conocimiento local, la salud de las personas, el ambiente, la autonomía local e impiden el efectivo cumplimiento del Derecho a la Alimentación.
7. Continúan desarrollándose tecnologías al servicio de los intereses de los grandes capitales, presentándolas como soluciones a las diferentes crisis que hoy enfrentan la Madre Tierra y la Humanidad. Sabemos que todas ellas son falsas soluciones, que son utilizadas como herramientas de acumulación y grandes negocios para las transnacionales, que sólo agravarán la dependencia, la concentración y la destrucción. Se destacan entre otras la geoingeniería, la nanotecnología, las tecnologías Terminator y similares, la biología sintética y el biochar.
8. El avance del libre comercio a través de los acuerdos de asociación económica de los tratados de libre comercio y de protección de inversiones, entre otros, son un ataque directo a la soberanía de los países y los pueblos, a la autonomía de los Estados y a la capacidad de acción multilateral de los organismos internacionales. A medida que avanza su implementación, se incrementan los impactos destructivos en las economías locales, en la soberanía alimentaria, el ambiente, los Derechos sociales y culturales de los pueblos y los Derechos de la Madre Tierra.
9. La actual agudización del acaparamiento de tierras y los océanos por parte de grupos económicos, empresas transnacionales y capitales especulativos, tanto estatales como privados, es una de las agresiones más graves e inminentes que enfrentan los pueblos y su soberanía alimentaria, social y política. La extrema concentración y extranjerización de la tierra, agravadas por las actuales normas de libre comercio, atentan contra la biodiversidad vegetal y animal, contra las reformas agrarias y los procesos de reconstitución de los territorios indígenas y campesinos, por los cuales los movimientos sociales han luchado sin descanso.
10. Las diversas formas de los Derechos de Propiedad Intelectual son un instrumento de privatización que destruye los sistemas de conocimiento originarios locales, tradicionales y científicos, restringiendo el uso y conservación de la biodiversidad agrícola e ilegalizando prácticas culturales y agrícolas locales, comunitarias y ancestrales.
Frente a esta realidad que sufren los pueblos en todo el mundo, los movimientos sociales y las organizaciones populares reunidas en esta CMPCC nos comprometemos a seguir luchando por un conjunto de soluciones y movilizarnos, hasta lograr que los gobiernos cumplan con su deber de llevarlas adelante. Pondremos, al centro de nuestros esfuerzos, la construcción de soberanía alimentaria, defendiendo y apoyando a la agricultura campesina e indígena, como generadoras de alimentos, dignidad e identidad, y como una alternativa real y concreta para enfriar al Planeta. Las SOLUCIONES, que vemos como prioritarias, son:
11. Valorizar y recuperar las agroculturas y las formas de vida locales, campesinas e indígenas, y los sistemas de conocimiento ancestrales de producción y recolección de alimentos, los sistemas locales y tradicionales de salud, los cuales han sido deteriorados y subvalorados por la lógica agroindustrial orientada a la sobreproducción, la exportación y la generación de ganancia, remarcando que la Soberanía Alimentaria es el camino para responder y solucionar el Cambio Climático.
12. Promover y asegurar el financiamiento de políticas y mecanismos de control social participativo y público sobre los sistemas de producción agropecuaria, para evitar el daño a la Madre Tierra. Éstas deben incluir la investigación, extensión e inversión pública para eliminar el uso de insumos agrícolas basados en petroquímicos, para mejorar el contenido orgánico del suelo, reducir las pérdidas pos-cosechas, fortalecer mercados locales, proteger las fuentes y cuerpos de agua y también apoyar la agricultura familiar campesina-indígena y la soberanía alimentaria.
13. Defender, revalorizar y difundir el modelo sustentable de producción agrícola campesino e indígena/originario, y otros modelos y prácticas ancestrales ecológicas que contribuyan a solucionar el problema del Cambio Climático y aseguren la soberanía alimentaria, entendida como el derecho de los pueblos a controlar sus propias semillas, tierras, agua y la producción de alimentos, garantizando, a través de una producción en armonía con la Madre Tierra, local y culturalmente apropiada, el acceso de los pueblos a alimentos suficientes, variados y nutritivos, en complementación con la Madre Tierra y profundizando la producción autónoma (participativa, comunitaria y compartida) de cada nación y pueblo.
14. Reconocer el derecho de todos los pueblos, los seres vivos y la Madre Tierra a acceder y gozar del agua. Asimismo, reconocer el derecho de los pueblos y países a controlar, regular y planificar el uso y manejo respetuoso y solidario del agua y sus ciclos, prohibiendo cualquier forma de privatización y mercantilización del agua, creando órganos de participación popular que regulen sus usos múltiples, protejan su calidad y planifiquen su uso futuro, para consumo de los seres vivos y para la producción alimentaria. En este marco, apoyamos la propuesta del Gobierno de Bolivia para reconocer al agua como un Derecho Humano Fundamental, según se expresa en la “Declaratoria del Derecho Humano al Agua”, y que vemos como un paso importante en la dirección correcta.
15. Prohibir las tecnologías y procesos tecnológicos que ponen en peligro el bienestar y la superviviencia de la Madre Tierra y los seres vivos y que se impulsan exclusivamente por su potencial para producir ganancias para un reducido número de empresas, a la vez que provocan y aceleran el Cambio Climático como: los agrocombustibles, los organismos genéticamente modificados, la nanotecnología, la geoingeniería y todas aquellas que -bajo el supuesto de ayudar al clima- en realidad, atentan contra la soberanía alimentaria y agreden a la Madre Tierra. Prohibir a nivel mundial de manera definitiva las tecnologías Terminator, farmacultivos y similares.
16. Rechazar, condenar y prohibir cualquier estrategia político-militar y comercial que atente contra la soberanía alimentaria de los pueblos y los vuelva vulnerables al Cambio Climático.
17. Defender la primacía de los Derechos humanos, económicos, sociales y culturales, los Derechos de la Madre Tierra y la biodiversidad por encima de los TRIPS (tratados que protegen la propiedad intelectual) y cualquier otro acuerdo comercial de derecho internacional. Los países deben también asegurar el respeto al carácter colectivo de los conocimientos de las comunidades indígenas originarias y campesinas, y por tanto, el derecho colectivo de decisión sobre el acceso y el uso de estos conocimientos. Las medidas nacionales para implementar esto no serían sujetos de litigio, bajo las reglas de acuerdos comerciales que fortalecen o protegen los Derechos de propiedad intelectual. Toda investigación formal desarrollada con apoyo público debe ser bien público, no sujeto a las reglas de propiedad intelectual que restringen compartir la información.
18. Prohibir el patentamiento y cualquier forma de propiedad intelectual, sobre toda forma de vida y conocimiento ancestral y tradicional, anulando las patentes existentes.
19. Prohibir las prácticas de dumping (venta de productos por debajo del costo de producción) y prácticas comerciales desleales de los países industrializados, las cuales distorsionan los precios de los alimentos, afectando la soberanía alimentaria y haciendo que los países no industrializados sean más vulnerables al Cambio Climático.
20. Implementar políticas y normativas de protección de la pequeña producción nacional de alimentos, incluyendo el tipo de subsidios que considere necesario hacia su sector agropecuario, como también garantizar su derecho para poner barreras arancelarias equivalentes a cualquier subsidio, incorporado en productos exportados.
21. Afirmar que parte central de la solución del Cambio Climático se da a través del fortalecimiento y ampliación de los sistemas agroalimentarios campesinos, originarios, de agricultura urbana y de pescadores artesanales. Esto significa que no solamente es necesario cambiar la lógica de producción industrial de alimentos, orientada al mercado global y el lucro, sino también cambiar la visión que asume que la tierra es un recurso de explotación sin Derechos, orientada a satisfacer la avaricia del ser humano. Nosotros -como pueblos reunidos- afirmamos que el Planeta es un ente vivo con Derechos y espíritu.
22. Impulsar procesos amplios, profundos, genuinos de Reforma Agraria Integral y de reconstitución de territorios indígenas, afrodescendientes, campesinos de construcción participativa de los pueblos, con enfoque de género a fin de que los pueblos campesinos e indígenas/originarios, sus culturas y formas de vida recuperen su papel central y fundamental en las agriculturas del mundo para lograr la Soberanía Alimentaria y recuperar la armonía para lograr el equilibrio climático del Planeta. Una reforma agraria de este tipo debe incluir el respeto a los conocimientos locales y ancestrales y garantizar los medios necesarios, para asegurar la producción en todas las etapas de la cadena (cultivo, procesamiento, comercialización).
23. Promover y consolidar la educación integral (espiritual, material y social) para la Soberanía Alimentaria como sustento de las transformaciones necesarias, integrando sus propuestas a todos los niveles de educación formal y no formal, desarrollando contenidos surgidos de las realidades locales sobre la base de una visión pluricultural y una plena participación de las comunidades, respondiendo a las necesidades de cada región y comunidad.
24. Declarar a las semillas nativas y criollas como Patrimonio de los Pueblos al Servicio de la Humanidad, base fundamental de la Soberanía Alimentaria y de libre circulación en manos de los pueblos indígenas/originarios y campesinos, cuidadas y multiplicadas por los custodios de semillas, de acuerdo a las culturas de cada pueblo.
25. Exigir que los impactos del calentamiento global sobre la Soberanía Alimentaria se inserten dentro del marco de discusiones sobre el Cambio Climático.”
La Asamblea concluyó con el compromiso de que el cambio parte de todos y cada uno de nosotros.
Las Conclusiones Finales se debatirán en una Plenaria Final junto a otras mesas de trabajo.
Durante la última reunión, se llegó a un acuerdo general:
“Los movimientos sociales y organizaciones populares, reunidos en la Cumbre, constatamos que -a pesar de nuestras numerosas movilizaciones y constantes denuncias- los gobiernos capitalistas, los organismos internacionales y las entidades financieras continúan en la senda de agravar la destrucción del Planeta. El Cambio Climático es una de las más serias amenazas a la Soberanía Alimentaria de todos los pueblos del mundo. Una vez más constatamos que:
1. El agronegocio, a través de su modelo social, económico y cultural de producción capitalista globalizada y su lógica de producción de alimentos para el mercado y no para cumplir con el derecho a la alimentación, es una de las causas principales del Cambio Climático. El cambio de uso de suelo (la deforestación y la expansión de la frontera agrícola), los monocultivos, la producción, comercialización y utilización de insumos agrotóxicos y agroquímicos, el procesamiento industrial de alimentos y toda su logística para transportarlos miles de kilómetros hasta llegar al consumidor, la producción de GEI en los megadepósitos de basura y estiércol de la ganadería industrial intensiva son causantes principales de la crisis climática y del crecimiento del número de personas hambrientas en el mundo.
2. La depredación y destrucción de los acuíferos, las fuentes y los cuerpos de agua y de los ecosistemas y ciclos ecológicos, que le dan vida, están indisolublemente ligados a los procesos de privatización, que se impulsan desde los gobiernos capitalistas y los organismos internacionales. Al mismo tiempo, que vemos cómo el Cambio Climático destruye glaciares y otras fuente de agua, constatamos que el derecho humano fundamental de acceso al agua para el consumo de los seres vivos y la producción de alimentos se restringe, día a día, producto del avance de la agropecuaria industrial, la minería, la extracción de hidrocarburos, el procesamiento industrial de alimentos, las plantaciones forestales, la plantación y producción de agrocombustibles, la acuicultura industrial y los megaproyectos hidroeléctricos.
3. El despliegue territorial de megaproyectos de infraestructura, al servicio del capital, altera los procesos naturales, sociales y culturales, imposibilitando formas de convivencia armoniosa con la Madre Tierra, destruyendo medios de vida, expulsando a las comunidades campesinas, indígena y pescadoras de sus territorios y facilitando la expansión del modelo extractivo y agroexportador.
4. El Cambio Climático provoca la migración forzada en las áreas rurales; es una amenaza para los pueblos indígenas/originarios, comunidades campesinas y de pescadores, quienes son los más damnificados al ser destruidos sus medio de vida, su sabiduría agrícola ancestral y local y, por ende, su identidad.
5. Los agrocombustibles no representan una alternativa porque anteponen la producción agrícola para el transporte, frente a la producción de alimentos para los seres humanos. Los agrocombustibles amplían la frontera agrícola, destruyendo los bosques y la biodiversidad, generan monocultivos, promueven la concentración de la tierra, deterioran los suelos, agotan las fuentes de agua, contribuyen al alza del precio de los alimentos y consumen más energía de la que generan.
6. Los Organismos Genéticamente Modificados (OGM) tampoco son una solución al Cambio Climático y representan exclusivamente un instrumento de las corporaciones para controlar las semillas y la alimentación a nivel global. Significan un serio atentado contra el conocimiento local, la salud de las personas, el ambiente, la autonomía local e impiden el efectivo cumplimiento del Derecho a la Alimentación.
7. Continúan desarrollándose tecnologías al servicio de los intereses de los grandes capitales, presentándolas como soluciones a las diferentes crisis que hoy enfrentan la Madre Tierra y la Humanidad. Sabemos que todas ellas son falsas soluciones, que son utilizadas como herramientas de acumulación y grandes negocios para las transnacionales, que sólo agravarán la dependencia, la concentración y la destrucción. Se destacan entre otras la geoingeniería, la nanotecnología, las tecnologías Terminator y similares, la biología sintética y el biochar.
8. El avance del libre comercio a través de los acuerdos de asociación económica de los tratados de libre comercio y de protección de inversiones, entre otros, son un ataque directo a la soberanía de los países y los pueblos, a la autonomía de los Estados y a la capacidad de acción multilateral de los organismos internacionales. A medida que avanza su implementación, se incrementan los impactos destructivos en las economías locales, en la soberanía alimentaria, el ambiente, los Derechos sociales y culturales de los pueblos y los Derechos de la Madre Tierra.
9. La actual agudización del acaparamiento de tierras y los océanos por parte de grupos económicos, empresas transnacionales y capitales especulativos, tanto estatales como privados, es una de las agresiones más graves e inminentes que enfrentan los pueblos y su soberanía alimentaria, social y política. La extrema concentración y extranjerización de la tierra, agravadas por las actuales normas de libre comercio, atentan contra la biodiversidad vegetal y animal, contra las reformas agrarias y los procesos de reconstitución de los territorios indígenas y campesinos, por los cuales los movimientos sociales han luchado sin descanso.
10. Las diversas formas de los Derechos de Propiedad Intelectual son un instrumento de privatización que destruye los sistemas de conocimiento originarios locales, tradicionales y científicos, restringiendo el uso y conservación de la biodiversidad agrícola e ilegalizando prácticas culturales y agrícolas locales, comunitarias y ancestrales.
Frente a esta realidad que sufren los pueblos en todo el mundo, los movimientos sociales y las organizaciones populares reunidas en esta CMPCC nos comprometemos a seguir luchando por un conjunto de soluciones y movilizarnos, hasta lograr que los gobiernos cumplan con su deber de llevarlas adelante. Pondremos, al centro de nuestros esfuerzos, la construcción de soberanía alimentaria, defendiendo y apoyando a la agricultura campesina e indígena, como generadoras de alimentos, dignidad e identidad, y como una alternativa real y concreta para enfriar al Planeta. Las SOLUCIONES, que vemos como prioritarias, son:
11. Valorizar y recuperar las agroculturas y las formas de vida locales, campesinas e indígenas, y los sistemas de conocimiento ancestrales de producción y recolección de alimentos, los sistemas locales y tradicionales de salud, los cuales han sido deteriorados y subvalorados por la lógica agroindustrial orientada a la sobreproducción, la exportación y la generación de ganancia, remarcando que la Soberanía Alimentaria es el camino para responder y solucionar el Cambio Climático.
12. Promover y asegurar el financiamiento de políticas y mecanismos de control social participativo y público sobre los sistemas de producción agropecuaria, para evitar el daño a la Madre Tierra. Éstas deben incluir la investigación, extensión e inversión pública para eliminar el uso de insumos agrícolas basados en petroquímicos, para mejorar el contenido orgánico del suelo, reducir las pérdidas pos-cosechas, fortalecer mercados locales, proteger las fuentes y cuerpos de agua y también apoyar la agricultura familiar campesina-indígena y la soberanía alimentaria.
13. Defender, revalorizar y difundir el modelo sustentable de producción agrícola campesino e indígena/originario, y otros modelos y prácticas ancestrales ecológicas que contribuyan a solucionar el problema del Cambio Climático y aseguren la soberanía alimentaria, entendida como el derecho de los pueblos a controlar sus propias semillas, tierras, agua y la producción de alimentos, garantizando, a través de una producción en armonía con la Madre Tierra, local y culturalmente apropiada, el acceso de los pueblos a alimentos suficientes, variados y nutritivos, en complementación con la Madre Tierra y profundizando la producción autónoma (participativa, comunitaria y compartida) de cada nación y pueblo.
14. Reconocer el derecho de todos los pueblos, los seres vivos y la Madre Tierra a acceder y gozar del agua. Asimismo, reconocer el derecho de los pueblos y países a controlar, regular y planificar el uso y manejo respetuoso y solidario del agua y sus ciclos, prohibiendo cualquier forma de privatización y mercantilización del agua, creando órganos de participación popular que regulen sus usos múltiples, protejan su calidad y planifiquen su uso futuro, para consumo de los seres vivos y para la producción alimentaria. En este marco, apoyamos la propuesta del Gobierno de Bolivia para reconocer al agua como un Derecho Humano Fundamental, según se expresa en la “Declaratoria del Derecho Humano al Agua”, y que vemos como un paso importante en la dirección correcta.
15. Prohibir las tecnologías y procesos tecnológicos que ponen en peligro el bienestar y la superviviencia de la Madre Tierra y los seres vivos y que se impulsan exclusivamente por su potencial para producir ganancias para un reducido número de empresas, a la vez que provocan y aceleran el Cambio Climático como: los agrocombustibles, los organismos genéticamente modificados, la nanotecnología, la geoingeniería y todas aquellas que -bajo el supuesto de ayudar al clima- en realidad, atentan contra la soberanía alimentaria y agreden a la Madre Tierra. Prohibir a nivel mundial de manera definitiva las tecnologías Terminator, farmacultivos y similares.
16. Rechazar, condenar y prohibir cualquier estrategia político-militar y comercial que atente contra la soberanía alimentaria de los pueblos y los vuelva vulnerables al Cambio Climático.
17. Defender la primacía de los Derechos humanos, económicos, sociales y culturales, los Derechos de la Madre Tierra y la biodiversidad por encima de los TRIPS (tratados que protegen la propiedad intelectual) y cualquier otro acuerdo comercial de derecho internacional. Los países deben también asegurar el respeto al carácter colectivo de los conocimientos de las comunidades indígenas originarias y campesinas, y por tanto, el derecho colectivo de decisión sobre el acceso y el uso de estos conocimientos. Las medidas nacionales para implementar esto no serían sujetos de litigio, bajo las reglas de acuerdos comerciales que fortalecen o protegen los Derechos de propiedad intelectual. Toda investigación formal desarrollada con apoyo público debe ser bien público, no sujeto a las reglas de propiedad intelectual que restringen compartir la información.
18. Prohibir el patentamiento y cualquier forma de propiedad intelectual, sobre toda forma de vida y conocimiento ancestral y tradicional, anulando las patentes existentes.
19. Prohibir las prácticas de dumping (venta de productos por debajo del costo de producción) y prácticas comerciales desleales de los países industrializados, las cuales distorsionan los precios de los alimentos, afectando la soberanía alimentaria y haciendo que los países no industrializados sean más vulnerables al Cambio Climático.
20. Implementar políticas y normativas de protección de la pequeña producción nacional de alimentos, incluyendo el tipo de subsidios que considere necesario hacia su sector agropecuario, como también garantizar su derecho para poner barreras arancelarias equivalentes a cualquier subsidio, incorporado en productos exportados.
21. Afirmar que parte central de la solución del Cambio Climático se da a través del fortalecimiento y ampliación de los sistemas agroalimentarios campesinos, originarios, de agricultura urbana y de pescadores artesanales. Esto significa que no solamente es necesario cambiar la lógica de producción industrial de alimentos, orientada al mercado global y el lucro, sino también cambiar la visión que asume que la tierra es un recurso de explotación sin Derechos, orientada a satisfacer la avaricia del ser humano. Nosotros -como pueblos reunidos- afirmamos que el Planeta es un ente vivo con Derechos y espíritu.
22. Impulsar procesos amplios, profundos, genuinos de Reforma Agraria Integral y de reconstitución de territorios indígenas, afrodescendientes, campesinos de construcción participativa de los pueblos, con enfoque de género a fin de que los pueblos campesinos e indígenas/originarios, sus culturas y formas de vida recuperen su papel central y fundamental en las agriculturas del mundo para lograr la Soberanía Alimentaria y recuperar la armonía para lograr el equilibrio climático del Planeta. Una reforma agraria de este tipo debe incluir el respeto a los conocimientos locales y ancestrales y garantizar los medios necesarios, para asegurar la producción en todas las etapas de la cadena (cultivo, procesamiento, comercialización).
23. Promover y consolidar la educación integral (espiritual, material y social) para la Soberanía Alimentaria como sustento de las transformaciones necesarias, integrando sus propuestas a todos los niveles de educación formal y no formal, desarrollando contenidos surgidos de las realidades locales sobre la base de una visión pluricultural y una plena participación de las comunidades, respondiendo a las necesidades de cada región y comunidad.
24. Declarar a las semillas nativas y criollas como Patrimonio de los Pueblos al Servicio de la Humanidad, base fundamental de la Soberanía Alimentaria y de libre circulación en manos de los pueblos indígenas/originarios y campesinos, cuidadas y multiplicadas por los custodios de semillas, de acuerdo a las culturas de cada pueblo.
25. Exigir que los impactos del calentamiento global sobre la Soberanía Alimentaria se inserten dentro del marco de discusiones sobre el Cambio Climático.”
La Asamblea concluyó con el compromiso de que el cambio parte de todos y cada uno de nosotros.
Las Conclusiones Finales se debatirán en una Plenaria Final junto a otras mesas de trabajo.
LA MESA 17: “AGRICULTURA Y SOBERANÍA ALIMENTARIA” RECHAZA EL MODELO CAPITALISTA Y LO RESPONSABILIZA POR EL CAMBIO CLIMÁTICO
La Mesa de Trabajo Nº 17: Agricultura y Soberanía Alimentaria, coincidiendo con la declaración que el Presidente boliviano Evo Morales Ayma, realizó en el Coliseo Ecológico de Tiquipaya, realizó una declaración unánime de los Pueblos Indígenas y Campesinos, Pescadores Artesanales de Venezuela y representantes de otras organizaciones de diferentes países; expresando su rechazo contundente al sistema económico capitalista, principal causa del cambio climático.
Luego de la declaración, realizaron un pronunciamiento en el que declaran que la ideología socialista es común a todos ellos.
Posteriormente procedieron al análisis y aprobación de los 21 artículos propuestos el día de ayer lunes. Este documento consta de dos partes:
• La primera parte abarca las denuncias en contra del modelo capitalista
• La segunda abarca diferentes soluciones para plantearse ante la ONU
Al llegar al punto 18 se incluyó un nuevo artículo, conformando un total de 22, de los cuales se aprobaron 20.
Mañana miércoles, de 8:30 am a 10:30, se tiene previsto la conclusión del análisis y aprobación de los dos últimos artículos, para luego elaborarse el documento final.
Luego de la declaración, realizaron un pronunciamiento en el que declaran que la ideología socialista es común a todos ellos.
Posteriormente procedieron al análisis y aprobación de los 21 artículos propuestos el día de ayer lunes. Este documento consta de dos partes:
• La primera parte abarca las denuncias en contra del modelo capitalista
• La segunda abarca diferentes soluciones para plantearse ante la ONU
Al llegar al punto 18 se incluyó un nuevo artículo, conformando un total de 22, de los cuales se aprobaron 20.
Mañana miércoles, de 8:30 am a 10:30, se tiene previsto la conclusión del análisis y aprobación de los dos últimos artículos, para luego elaborarse el documento final.
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